En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas.

Isaías 61:10

En el más allá serán vestidos con los ropajes de salvación sólo quienes ahora están cubiertos con el manto de la justicia de Cristo y, por la santificación del Espíritu, Estas bendiciones brotarán en épocas venideras como surge el fruto de la  tierra. Tan oportunamente, tan continuamente y con gran provecho para la humanidad, Dios hará que broten la justicia y la alabanza. Ellas se extenderán lejos; la gran salvación será publicada y proclamada a los confines de la tierra. Seamos fervorosos para orar, que Dios siempre nos llene de su vestidura de salvación.